Acompañar a los jóvenes en camino

Acompañar a los jóvenes en la creación de un futuro esperanzador

Acompañar a los jóvenes en camino

Acompañar a los jóvenes en la creación de un futuro esperanzador

Acompañar a los jóvenes en camino

La realidad - cómo están las cosas

La juventud es un momento de tomar decisiones fundamentales y el comienzo del proceso de hacer realidad y cumplir nuestros sueños. Y sin embargo, los jóvenes de hoy enfrentan enormes desafíos: la incertidumbre de las relaciones en una era digital, la disminución de las oportunidades de trabajo, el crecimiento de la violencia política, la discriminación y la degradación del medio ambiente. Todo esto hace que les sea difícil encontrar un camino donde puedan construir relaciones de apoyo, personales y familiares, basadas en sólidos fundamentos espirituales y financieros.

El sueño de Dios

Conociendo a Jesús, la gente joven puede encontrar el camino hacia la realización más profunda. “Yo he venido para que tengas vida y la tengas en abundancia”.
El Sínodo de 2018 sobre la Juventud y el Discernimiento Vocacional reconoce la importancia de las perspectivas de los jóvenes. Nosotros estamos al lado de ellos. Vemos destellos del futuro con ellos. Caminamos con ellos con el fin de percibir y discernir hacia dónde está guiando el Espíritu a nuestro mundo y a nuestra Iglesia.

Yo ruego que de sus gloriosas riquezas él pueda fortalecerles con poder, a través de su Espíritu, en su ser interior, para que Cristo pueda morar en sus corazones a través de la fe. (...) Ahora, a aquel que es capaz de hacer muchísimo más de todo lo que le pedimos o imaginamos, de acuerdo con su poder que siempre está obrando en nuestro interior, ¡para él la gloria en la iglesia y en Cristo Jesús a lo largo de todas las generaciones, por los siglos de los siglos! Amén.

Efesios 3:14-20 (NVI)

La cultura del encuentro es un llamado que nos invita a atrevernos a mantener vivo un sueño compartido. Sí, un gran sueño, un sueño que tiene un lugar para todos y cada uno.

El Papa Francisco a los participantes del JMJ 2018 en Panamá

Nuestra respuesta

uaps_3-journeying_our-response

En esta era digital, los jóvenes tienen tantas posibilidades que los unen como nunca antes. Nosotros queremos caminar con ellos, discerniendo estas posibilidades y encontrando a Dios en las profundidades de la realidad. Acompañar a la gente joven nos pone en el camino de la conversión; esto requiere una nueva forma de vivir en la comunidad jesuita, una forma que sea más coherente, más personal, más abierta, más evangélica.

Deseamos que nuestras obras y casas apostólicas sean espacios abiertos a la creatividad juvenil en los que se fomente el encuentro con el Dios de la vida, revelado por Jesús y la profundización de la fe cristiana.

Nos comprometemos a promover un entorno sano y seguro para los niños y los jóvenes de manera que puedan desarrollar todo su potencial como seres humanos.

Queremos ayudar a los jóvenes a conocer a Jesucristo y a sentirse a sí mismos amados, rescatados/salvados y perdonados.

Le pedimos a nuestras escuelas, a nuestras universidades y a aquellos que trabajan en parroquias que ayuden en el desarrollo de la fe de la gente joven y que adapten creativamente los Ejercicios Espirituales para que los jóvenes puedan conocer personalmente a Jesús de maneras mucho más profundas y seguirlo, a Él, más de cerca.

¿Qué hacer?


• Escucha el llamado de Dios a través de la oración en la pestaña ¿Cómo orar?

• Reflexiona sobre la relación con tus hijos e hijas. Piensa cómo podría ser mejor. Intenta poner en práctica las conclusiones.

• Apoya la agenda de educación sexual responsable.

• Obtén más información sobre los problemas, los desafíos y la realidad de los jóvenes.

• Inspira a otras personas compartiendo este sitio con tus amigos.


Marcos 10, 17-31. El joven rico

Jesús lo miró con amor y añadió: “Una sola cosa te falta: anda, vende todo lo que tienes y dáselo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo. Luego ven y sígueme.”


El Sínodo sobre la Juventud habló de la contribución de los jóvenes:

“A través de ellos ha resonado en el Sínodo la voz de toda una generación. Caminando con ellos, peregrinos a la tumba de Pedro, hemos experimentado que la cercanía crea las condiciones para que la Iglesia sea un espacio de diálogo y testimonio de fraternidad que fascine. La fuerza de esta experiencia supera toda fatiga y debilidad. El Señor sigue repitiéndonos: ‘No temáis, yo estoy con vosotros’.”

Oración de los jóvenes

Señor, aquí estoy otra vez ante ti
Para pedirte que me perdones
Si en algo te he ofendido,
Olvidándome de cuanto me quieres,
Sin pensar que siempre me estas viendo.
Perdón Jesús.

Gracias porque siempre estas aquí conmigo
Para escucharme y perdonarme.

Te pido por los jóvenes, que como yo,
A veces no sabemos valorar
Cuanto nos das sin merecerlo.
Te pido sabiduría y entendimiento
Para poder comprender cual es tu voluntad.

Te pido que los jóvenes de hoy sigan tu camino,
Como estoy tratando de seguirlo yo,
Para que mañana que seamos adultos
Seamos mejores personas y agradarte más,

Gracias señor por la juventud
Y la alegría que nos da tu amor,
Que es la gasolina que prende nuestro corazón.

Eres la luz en la obscuridad,
Eres lo más grande y bello que puede existir.
Y cuando estoy así tan en confianza contigo,
Ya no tengo ganas de pecar más,

Ayúdame a quererte más, a creerte más,
Que este amor que ahora siento por ti
No se apague jamás.
Amen.

Oración antes de un examen

¡Señor, voy a rendir un examen
dame paz, ven conmigo!
Concédeme la simplicidad y la alegría
de cosechar el fruto de las semillas que plante
en las largas horas de silencio y estudio.

Que el examen sea la ofrenda del esfuerzo
de estudiar cada día en medio de
mis alegrías, soledades y preocupaciones.

¡Que no haya orgullo cuando sepa mucho
ni miedo a recordar lo que aprendí!
No te pido milagros, solo la lucidez
que dinamice y de fuerzas a mi corazón.

Quédate señor a mi lado, tú que
más de una vez fuiste puesto a prueba.
¡Concede que quienes han de examinarme,
sean razonables y justos con todos los que
vamos a rendir, tengan Paciencia y Paz!

¡Señor, mi Dios, escúchame y Ayúdame!
¡Ven espíritu Santo, ilumíname
y líbrame de todo temor Amen!

Noticias relacionadas